New Museum of Contemporary Art / Kazuyo Sejima + Ryue Nishizawa – SANAA

Arquitectos
SANAA
Ubicación
Nueva York
Superficie
5.450 metros cuadrados
Año
2007

New Museum pretende ser un hogar para el arte contemporáneo y una incubadora de nuevas ideas, así como también una contribución arquitectónica al paisaje urbano de New York. Sejima y Nishizawa, quienes recibieron la comisión en el 2002, han descrito al edificio como su respuesta a la historia y a las poderosas personalidades del New Museum. El museo es una combinación entre la elegancia y el urbanismo. En medio de un grupo de relativamente pequeños y medianos edificios de diferentes tipos y usos, el New Museum se eleva a 53 metros sobre el nivel de la calle. El edificio consiste en siete cajas rectangulares apiladas.

Esta forma distintiva deriva directamente de la solución de los arquitectos a los desafíos del lugar. El programa era denso y ambicioso y buscaba espacios abiertos y flexibles de diferentes alturas y atmósferas. Con la intención de hacer frente a estas condiciones y sin caer en un edificio monolítico, oscuro y sin aire, SANAA asignó los elementos clave de programación a una serie de niveles (las siete cajas) y los apiló de acuerdo a las necesidades y a los patrones de circulación de los usuarios del edificio. Luego extrajeron los diferentes niveles de las vértebras del edificio hacia el norte, al sur, al este y al oeste. Estos desplazamientos producen una variedad de espacios interiores abiertos, fluidos, y llenos de luz, de diferentes alturas en todos los niveles, con diferentes características pero todos libres de columnas.

El New Museum está revestido con una capa de aluminio anodizado elegida por SANAA para enfatizar los volúmenes de las cajas y «vestir» al edificio con una delicada, transparente, suave y brillosa piel.

Con ventanas solamente visibles detrás de esta porosa superficie (conseguida mediante el uso de un material nunca antes utilizado para una fachada de edificio) la estructura se visualiza como una simple y coherente forma, que es también dinámica, animada y muta según la cambiante luz del día: una apropiada metáfora visual para la apertura del New Museum y para la siempre cambiante naturaleza del arte contemporáneo.

«Fue difícil organizar la arquitectura alrededor de todos los deseos. Sabíamos que no podíamos maximizar el lugar con arquitectura sólida. De alguna manera debíamos reducir la masa del edificio para crear espacio entre él y el perímetro. La solución de las cajas desplazadas llegó rápido e intuitivamente. Luego, después de prueba y error, llegamos a la configuración ideal final. Habíamos logrado un edificio que se integra a la ciudad, permite la entrada de luz natural, brinda galerías libres de columnas y flexibilidad programática.»

Los visitantes son atraídos hacia el New Museum con vistas a través de una placa de vidrio de 4,5 metros de altura, a través de la cual los visitantes pueden ver la actividad en la planta baja del edificio, el espacio de transición entre la vida de la calle y la del museo.

Un camino de cemento gris afuera da paso a pisos grises de cemento pulido en el Marcia Tucker Hall. Este espacio contiene el área de servicio para visitantes, el área de tickets, el guardarropas, el New Museum Store, el New Museum Café y su cocina abierta, la escalera hacia el subsuelo y el Teatro, ascensores para acceder a las galerías superiores, y una luminosa galería de 335 metros cuadrados, separada del resto del espacio por una pared de vidrio e iluminada por luz natural que se filtra por el desplazamiento de la caja que se encuentra por encima.

Descendiendo al subsuelo, los visitantes se encuentran con el teatro/auditorio «White box», de 182 asientos, y un hall que funciona como una galería para proyectos especiales e instalaciones. En este piso también se encuentran los espacios de descanso del museo (donde azulejos con gráficos cubren las paredes y aportan el único color intenso dentro del edificio, además del verde vibrante de las cabinas de los ascensores), áreas de almacenamiento y de soporte técnico.

El segundo nivel cuenta con aproximadamente 1524 metros cuadrados de espacio para exhibición, techos altos de 5,5 metros de altura, claraboyas en las paredes oeste y norte del edificio y suelos de hormigón que parecen flotar. El desplazamiento estructural de la caja en este nivel ha creado una galería adicional, tranquila, y único espacio de tres metros de ancho y 12 de largo, con acceso desde cualquier extremo de la galería, en el lado norte del núcleo principal.

El tercer piso cuenta con una galería, con aproximadamente 1219 metros cuadrados de espacio para exhibición, una altura de techo de 6,4 metros y claraboyas al este y al oeste. En esta planta, los visitantes encuentran una escalera de 15 metros hacia arriba en el lado norte del edificio. Este tramo de escaleras aterriza en uno de los espacios más excéntricos del edificio: «The Shaft Space». Un espacio de 1,5 metros por 2,4 metros, y 10 metros de altura, que se formó a partir del desplazamiento estructural entre la tercera y cuarta planta.

En un segundo aterrizaje, una enorme ventana de un solo panel trae luz natural en el alto y angosto hueco de la escalera, a través de una abertura troquelada de la malla de aluminio que cubre el Museo. Los visitantes llegan a la parte superior de estas escaleras, en frente de una amplia y horizontal banda de vidrio que ofrece vistas hacia el oeste a través del SoHo y hacia el río Hudson. Estos puntos de vista ofrecen a los visitantes una pausa momentánea de la experiencia de inmersión en el arte y les permite re-conectarse con el contexto de la ciudad y de la comunidad más allá de las paredes del museo.

La galería del cuarto piso tiene la menor cantidad de metros cuadrados del Museo pero aún así es la más alta de todas, con techos de 7,3 metros de altura. El espacio también tiene una claraboya que permite el ingreso de luz natural de variadas formas. Esto puede ser controlado, como en todas las salas del edificio, a través de un sistema de paneles ajustables bajo el cristal.

Las columnas estructurales exteriores se vuelven cada vez más expuestas sobre los pisos superiores al cuarto nivel. El quinto piso alberga el centro de la institución de educación, con aulas, un Centro de Recursos y una sala de edición de video. En el sexto piso se encuentran las oficinas del personal, baños y espacios de reunión.

En el séptimo piso del edificio, el New Museum ofrece al público uno de los espacios más impresionantes de Manhattan: un salón de usos múltiples de 3 metros de alto y cerca de 600 metros cuadrados, para eventos y programas especiales. El Sky Room cuenta con dos paredes de vidrio de piso a techo y está rodeado de vistas panorámicas de la ciudad desde una terraza exterior que se extiende sin interrupción alrededor de los lados este y sur del edificio.