Sobriedad Francesa / Oppel Arquitectura
Una casa en la que el estilo francés fue llevado a una versión tan suntuosa como actual, a la vera de una laguna. Un matrimonio con un gusto muy clásico y un excelente lote en una urbanización privada con salida a una laguna. Tales los datos básicos de este encargo, […]
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Una casa en la que el estilo francés fue llevado a una versión tan suntuosa como actual, a la vera de una laguna.
Un matrimonio con un gusto muy clásico y un excelente lote en una urbanización privada con salida a una laguna. Tales los datos básicos de este encargo, una mansión de dimensiones importantes que fue resuelta al más puro estilo francés y con la calidad constructiva de excelencia que es norma en el Estudio.
Otra de las premisas fue que el quincho tuviera las mejores visuales del agua. Por eso se proyectó una estructura junto a la pileta y laguna, con un espacio de transición entre la misma y la casa ocupada por una parrilla muy bien equipada, con un muro hecho en piedra, techo de vidrio para que la luz penetre a raudales y una barra con banquetas. Tan solo una de las huellas de que esta residencia fue diseñada para el disfrute de un hombre con grandes responsabilidades y su familia, que desean hacer de su casa un mundo independiente y placentero. Un remanso con estilo.
Los vestidores son otro ambiente en el que el Estudio se ha concentrado especialmente, convirtiendo al acto de CAMBIARSE en una ceremonia de culto.
Sólidos y prácticos, no solo guardan la ropa, los zapatos y accesorios; también los protegen y exhiben. En un buen cuarto de vestir, la rutina de decidir qué ponerse y de arreglarse es un programa.
En este caso la materialidad elegida fue la madera de lapacho, sumamente noble y elegante, con lustre oscuro. Integra la suite principal de la casa, en la planta alta, con el remate de una terraza sobre el contrafrente, dueña de vistas únicas del jardín, la laguna y más allá.