The Isabel Bader / Snøhetta

Fecha
2007 – 2014
Ubicación
Kingston, Ontario, Canadá
Obra
Universidad Centro de Artes Escénicas
Superficie
7500 metros cuadrados
Cliente
Queen’s University
Colaboradores
N45, Arup Acoustics, Theatre Performance Consultants

En las costas del noreste del lago Ontario, el histórico sitio Morton Brewery de 1830 ha sido remodelado como un Centro de Artes Escénicas de la Universidad de Queens en Kingston, Ontario. Siendo la única instalación de este tipo en la región, los 7.432 metros cuadrados del Isabel Bader unen una amplia gama de disciplinas bajo un mismo techo, albergando una sala de espectáculos de 566 asientos, salones de clase, ensayo y lugares de presentación para la Escuela de Música y los Departamentos de Teatro, Cine y medios de Comunicación de la Universidad de Queens.

A lo largo del proceso de diseño, Snøhetta trabajó en estrecha colaboración con la Universidad para desarrollar un entorno de aprendizaje cooperativo y de apoyo a los jóvenes artistas e intérpretes. Las impresionantes vistas y la calma natural inspiraron el lenguaje del diseño, la elección de materiales para el proyecto y la concepción de un espacio abierto, nítido y claro para que los estudiantes se centren en la educación artística. La estrategia arquitectónica de reutilización de edificios históricos del sitio fue desarrollada a través de talleres con los consultores de preservación y el Comité del Patrimonio de Kingston, definiendo una clara distinción entre las nuevas estructuras y elementos del patrimonio arquitectónico.

La fachada de acero inoxidable de las nuevas estructuras refleja los blancos monocromáticos y grises de los cielos de invierno y el lago congelado, haciendo referencia al momento en que el agua se convierte en hielo. El revestimiento complementario de madera gris oscura sobre las estructuras históricas referencia a cobertizos negros, cuya madera oscura fue utilizada para soportar la humedad.

Un espacio verde comunica a Isabel Bader con su vecino Tett Centre, proporcionando una visión abierta del lago Ontario para los visitantes que llegan al Campus.

La pieza central del nuevo Centro de Artes Escénicas es la sala de espectáculos de 566 asientos. Diseñado como un teatro de música clásica, las proporciones y la acústica se basan en los estudios de las grandes salas de concierto históricas de Europa. Trabajando en estrecha colaboración con los especialistas en acústica Arup, el diseño de la sala de conciertos permite excelentes actuaciones musicales en vivo, sin depender de la amplificación electrónica para una calidad de sonido óptima. La sala ofrece una experiencia atractiva e íntima de los artistas y el público.

Históricamente, los teatros de música clásica fueron diseñados como espacios relativamente simétricos basados en las preferencias arquitectónicas y estilísticas durante los periodos Barroco y Renacentista, pero a través del continuo feedback y estudios de modelos acústicos del Soundlab de Arup, el equipo de diseño fue capaz de desarrollar la conformación de la pared optimizada y reconocieron que empleando un diseño asimétrico del techo en una habitación simétrica se podría proporcionar una experiencia acústica excelente.

El diseño interior de la sala de conciertos imita los patrones geológicos de las rocas de la zona de Kingston, haciendo referencia a su papel como capital de la piedra caliza de Canadá. El empleo de algoritmos de modelado por ordenador en 3D, permitió a Snøhetta y a Arup formar un interior visualmente impresionante que proporcionara el nivel óptimo de difusión del sonido, textura de la superficie y reflexión. Durante las actuaciones musicales amplificadas, como el jazz o rock, una serie de cortinas acústicas puede ser desplegada sobre las secciones de las paredes laterales para permitir la absorción del sonido y reducir el tiempo de reverberación.

Al entrar en Isabel Bader, los estudiantes y los huéspedes son recibidos por un gran vestíbulo público con impresionantes vistas al mar. Este lugar de encuentro social se concibe como una continuación ininterrumpida del paisaje espectacular. Las porciones del techo están revestidas con el mismo metal reflectante de la fachada. Por la noche, las actividades y la luz del vestíbulo se dejan caer por la línea de la costa, creando un ambiente luminoso y seguro para los visitantes que salen al exterior. El nuevo patio permite a los clientes sentarse cerca del lago, manteniendo al mismo tiempo un borde natural entre la tierra y el agua.

El equipo de diseño recuperó y recicló grandes cantidades de piso de madera, columnas y vigas estructurales descubiertas en los edificios históricos que fueron utilizadas como revestimiento de paredes y techos en los espacios interiores públicos, así como de carpintería en la sala de espera y el vestíbulo. En el interior, la rica paleta de colores ofrece un entorno acogedor, atractivo para los estudiantes.