Espacio 34 | Escritorio de mujer / Diseñador Alejandro Uriburu
“Escritorio de Mujer” se concibe con el objetivo de crear un espacio que contenga referencias al diseño argentino -siendo éste el leitmotiv de la Edición 2016 de Casa FOA- y a la vez que represente un interiorismo cosmopolita. El espacio se identifica con una mujer adulta, de espíritu viajero, independiente […]
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“Escritorio de Mujer” se concibe con el objetivo de crear un espacio que contenga referencias al diseño argentino -siendo éste el leitmotiv de la Edición 2016 de Casa FOA- y a la vez que represente un interiorismo cosmopolita. El espacio se identifica con una mujer adulta, de espíritu viajero, independiente y refinada, que aprecia y valora el arte y los objetos de calidad. Se plantea una simetría espacial que se manifiesta en la combinación de estampados, volúmenes y formas geométricas en donde predominan el negro y blanco (algodón distinguido de Alba), con detalles y acentos en rosa en algunos objetos y principalmente en la gran obra de arte de la icónica Marilyn Monroe que inevitablemente define un estilo con reminiscencias al antiguo esplendor hollywoodense art decó.
También, y para lograr un efecto ecléctico, se incorporaron elementos midcentury; un par de obeliscos realizados en Viio negro, una silla director tapizada cuero croco natural negro y de estructura cromada, estantes recubiertos de espejo biselado y una poltrona original de los años 50, entre otros. El escritorio monolítico, realizado íntegramente en Dekton Aura, transmite solidez y presencia sin invadir la fortaleza de la obra de arte principal. La impronta argentina se manifiesta -además de con los obeliscos- a través de una vaca pintada en acrílico sobre tela realizada por el artísta plástico Alejandro Raineri.
Una alfombra de piel de vaca negra aporta informalidad y calidez junto con la moquette de lana natural de Kalpakian en color neutro. Las cortinas de terciopelo negro y blanco de Ronchamp enfatizan la paleta de colores y realzan la elegancia de esta mujer imaginaria. En su conjunto, se remarcó el contraste que existe per sé entre el eclecticismo de la propuesta y el tradicional estilo hispano colonial de principios de siglo XX de la casona que alberga esta edición nro. 33 de Casa FOA. Dos lámparas retro sirven de marco para la iluminación del espacio que si bien es funcional, también genera un clima teatral y hasta casi escenográfico, resaltando las obras y objetos elegidos por la mujer que vive este escritorio quién al llegar y levantar la mirada, revive sus experiencias, viajes y recuerdos.