Ninina Bakery / Estudio Verardo

Un espacio diseñado con la premisa de hacer convivir una cocina industrial y un lugar calmo y agradable donde disfrutar las exquisiteces que son la especialidad de la Casa. Así, con el alma-cocina a la vista, se apeló a cierto aire de los cafés que han proliferado en Williamsburg –Brooklyn– y se lo condimentó con la elegancia que imponen materiales como el mármol. La luz natural, que entra a raudales desde el frente y a través de claraboyas, termina de definir la contemporánea calidez que se respira en el local.

Superficies Utilizadas
Roble de Eslavonia
Mármol Calacata Estatuarieto
Azulejo Industrial
Hierro
Vidrio
Pino Paraná y Hemlock

Un ambiente entre industrial, cool y sofisticado es algo que se logra básicamente en función de la paleta de materiales elegidos. Aquí el roble de Eslavonia de los pisos y de una de las paredes, los azulejos blancos básicos y el mármol Calacata Estatuarieto en el bloque portentoso de la barra, se engarzan en una química que da con la estética buscada.

El logo de la marca se esmaltó sobre los azulejos y el mismo recurso se utilizó para la fachada. Las estanterías son de pino Paraná sin nudo y las mesas, de pino Hemlock. Por encima de los azulejos, la pared se pintó de negro, a tono con la puerta y la carpintería de hierro. Las lámparas colgantes en cobre aportan un toque especial.

La paleta cromática es tan acotada como la de materiales: blanco, negro y ese marrón/cobre de la madera y las lámparas. En el muro que fue revestido en roble, los tablones se dispusieron en forma vertical, acentuando la doble altura del espacio y estableciendo un juego con los pisos.

Se buscó una ornamentación relacionada con la cocina pero que a la vez reflejara la estética sofisticada con que se trabajó el ambiente: y la solución la dio un panel donde se pegaron moldes de aluminio para masitas de diferentes tamaños, que se pintaron de blanco generando una textura sumamente interesante.

La cocina mantiene la higiene y prolijidad de un laboratorio, con sus azulejos industriales y sus mesadas en acero inoxidable. Una claraboya de blindex con estructura de hierro permite la entrada de luz natural. Las lámparas de bronce se complementan con una iluminación bien fabril mediante sistemas de rieles pintados de negro. El refinamiento del diseño no es sino un espejo de la pastelería sofisticada que dio origen a este proyecto.